"Un ciudadano ruso trató de entrar al país de forma ilegal 30 pequeños cocodrilos, dos arañas, cuatro escorpiones y una serpiente venenosa, el hombre (…) explicó que se trataba de regalos para sus parientes", indica el comunicado de prensa aduanero.
Según el Servicio Federal de Aduanas de Rusia, la CITES (Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres) proscribe el tráfico de animales en peligro de extinción.
"Actualmente los animales han sido trasladados a un centro especializado", indicó la entidad.