Fuentes de Wafa, agencia oficial palestina, indicaron que los soldados clausuraron el edificio, comprobaron las identidades de los que estaban en la oficina en ese momento, revisaron las imágenes de las cámaras de seguridad de la agencia y entraron en su servidor.
Según el diario digital israelí The Times of Israel, la incursión israelí en la sede de Wafa, situada a unos centenares de metros de la casa del presidente palestino, Mahmud Abás, se realizó en el marco de la operación para encontrar al autor del ataque que el 9 de diciembre hirió a siete colonos israelíes en Cisjordania.
Una de las víctimas estaba embarazada y ella y su bebé, al que los médicos extrajeron el 9 de diciembre del vientre de su madre, se encuentran en estado crítico.
La entrada en Ramala del Ejército israelí, que no comentó los hechos, provocó pequeños disturbios en la zona próxima a las oficinas de Wafa y en otros puntos de la localidad.