Se trata del exjefe del distrito de Xinchang, Yao Jinqi, prófugo de la justicia china desde 2005.
Es el primer ex cargo público extraditado a China desde un país miembro de la Unión Europea.
Yao fue arrestado por la policía búlgara en octubre pasado, después de que la Interpol activara la llamada alerta roja a petición de Pekín. El 26 de noviembre, un tribunal de Sofía ordenó su extradición.
China lanzó una campaña anticorrupción a gran escala tras el ascenso de Xi Jinping al puesto de secretario general del Comité Central del Partido Comunista (PCCh), en noviembre de 2012, y a la presidencia del país, en marzo de 2013.
Durante los últimos cinco años fueron sancionados por diversas infracciones más de 1,53 millones de militantes del partido, según un informe divulgado en julio pasado por la Comisión Central de Disciplina del PCCh.