El tifón azotó la costa oriental de China este miércoles, cerca de las 9.00 hora local, arrojando lluvias torrenciales acompañadas de vientos huracanados.
La Administración Meteorológica de China mantiene la alerta roja en las zonas afectadas por el ciclón.
Las autoridades de cinco ciudades de la provincia de Zhejiang evacuaron a más de 144.000 personas, a los puertos regresaron más de 20.000 barcos pesqueros y casi 5.000 barcos de otros tipos, permanecen cerradas las instalaciones turísticas.
En la provincia de Fujian, también afectada por María, suspendieron su trabajo los centros educativos, se interrumpió la construcción de una serie de infraestructuras y las autoridades prohibieron a los buques navegar en el mar.
Los habitantes de Taiwán también sufren la llegada del tifón, con escuelas, guarderías e instalaciones estatales cerradas y la comunicación aérea interrumpida.
Según los meteorólogos, el supertifón María irá perdiendo su fuerza a su paso por el continente.