Desde el golpe de Estado de 2014 en Kiev, el nuevo Gobierno ucraniano ha impuesto una serie de restricciones económicas y comerciales a Rusia. Las medidas de respuesta rusas no se hicieron esperar y Moscú bloqueó la importación y el tránsito de las mercancías ucranianas al país.
Las restricciones rusas al tránsito se expanden tanto los productos que tienen prohibida su entrada al país, como a aquellos cuyos aranceles de importación estén por encima de cero. Esta decisión ha llevado a Kiev declarar que desde finales de 2015 Rusia está "llevando a cabo una agresión comercial y de tránsito" contra Ucrania.
El 21 de marzo de 2017, el Gobierno de Kiev cesó el programa de cooperación económica con Rusia que estaba en vigor desde 2011 y finalizaba en 2020.
"La finalización del programa es parte de un conjunto de medidas tomadas por el Gobierno de Ucrania para contrarrestar la política agresiva de Rusia en el contexto político general y en el comercio y la esfera económica en particular", dice el comunicado del Gobierno ucraniano.