"Convocamos una concentración para seguir exigiendo su puesta en libertad", dijo en declaraciones a los medios de comunicación Marcel Mauri, portavoz de Òmnium Cultural.
A la primera de ellas llegarán el 4 de julio el ex vicepresidente de la Generalitat (Gobierno catalán), Oriol Junqueras; el exconsejero de Relaciones Institucionales, Exteriores y Transparencia, Raül Romeva; el expresidente de la Asamblea Nacional Catalana (ANC) y diputado de Junts per Catalunya (JxCat) Jordi Sànchez; y el presidente de Òmnium Cultural, Jordi Cuixart.
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A esta misma prisión serán enviados también en los próximos días Jordi Turull (exportavoz del Gobierno catalán), Joaquim Forn (exconsejero de Interior) y Josep Rull (exconsejero de Territorio).
Tras la llegada al Gobierno de España del socialista Pedro Sánchez se puso en marcha un proceso para facilitar el acercamiento de estos presos a cárceles catalanas, donde tendrán más facilidades para recibir visitas de sus familias y reunirse con sus abogados.
Marcel Mauri afirmó este 3 de julio que el traslado de los presos "no es un gesto político ni una concesión", sino que es una medida destinada al cumplimento de sus derechos penitenciarios.
"Lo que reclamamos no es que estén en cárceles cercanas a sus casas, sino que estén en sus casas y que los políticos exiliados puedan volver", dijo el portavoz de Òmnium.
Por su parte, el ministro de Asuntos Exteriores de España, Josep Borrell, consideró que el acercamiento de los presos a Cataluña "puede favorecer el diálogo con el Gobierno catalán", aunque subrayó que esta medida "está prevista en el reglamento penitenciario y que no es ningún trato de favor".