El principal impulsor de la nueva tendencia fue el carismático presentador de televisión Iván Úrgant.
En uno de sus programas nocturnos, Úrgant inició como broma una campaña titulada 'Los bigotes de la suerte', en apoyo a la selección nacional de Rusia y a su entrenador, Stanislav Cherchésov (por él, de hecho, vienen los bigotes).
La idea era que los hombres que se uniesen a la campaña se dejaran los bigotes durante el Mundial y así trajeran suerte a su selección.
Muchas celebridades rusas decidieron apoyar la iniciativa, entre ellos los humoristas Timur Batrutdinov y Garik Jarlámov, el cantante de música popular Dima Bilán, o incluso el eterno líder del Partido Liberal Demócrata de Rusia, Vladímir Zhirinovski.
Además se viralizó el vídeo en el que las bailarinas rusas del teatro Bolshói también se sumaron a la campaña 'Los bigotes de la suerte'.
Miles de rusos de a pie también se unieron a la campaña.
Incluso aquellos que no tienen la oportunidad de lucir sus bigotes naturales, se las ingenian con mostachos postizos, pintados, de papel o cualquier otra forma de hacerse con 'Los bigotes de la suerte'.