"La empresa Splav [forma parte del consorcio Tecmash de la coporación estatal Rostec] obtuvo todas las autorizaciones necesarias para exhibir la lanzadera múltiple de misiles Tornado-G en el extranjero; se espera que el sistema suscite el interés de los potenciales clientes extranjeros y pueda sustituir en el futuro los sistemas Grad, que están en servicio en más de 60 países", dijo Rostec en un comunicado.
Las diferencias consisten en una mayor eficacia de tiro y unas municiones más potentes.
La ojiva de un misil del Tornado-G, de calibre 122 mm, pesa el doble de la del Grad y, como consecuencia, tiene un poder destructivo hasta seis veces mayor.
Además, la lanzadera cuenta con sistemas automatizados de guía, puntería y navegación.
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El Tornado-G, usado por las Fuerzas Armadas rusas desde 2012, está destinado a destruir efectivos, vehículos blindados, baterías de artillería y morteros y puestos de mando.
El sistema es capaz de disparar tanto un solo misil como múltiples.