En una entrevista con la agencia de noticias ucraniana Unian, Mogherini señaló que iincumbe al Consejo de Seguridad de la ONU tomar decisiones en esta materia.
Un informe redactado por el experto Richard Gowan a petición de Rasmussen Global, la empresa del ex secretario general de la OTAN Anders Fogh Rasmussen, recomienda a la ONU estudiar el envío de una fuerza de paz de hasta 20.000 militares al este de Ucrania, incluyendo unos 5.000 efectivos desplegados en la frontera ucraniano-rusa y hasta 4.000 policías.
El presidente de Rusia, Vladímir Putin, avala el despliegue de cascos azules en Ucrania siempre y cuando su misión consista en garantizar la seguridad de los observadores de la OSCE y no se extienda más allá de la línea de separación entre las tropas del Gobierno ucraniano y las milicias de Donbás.
Desde abril de 2014 Ucrania lleva a cabo una operación contra las milicias en el este de su territorio donde se proclamaron las repúblicas populares de Donetsk y Lugansk en respuesta al violento cambio de Gobierno ocurrido en Kiev en febrero del mismo año.
Los acuerdos de Minsk, suscritos en septiembre de 2014 y en febrero de 2015, sentaron las bases para una solución política del conflicto pero no han derivado hasta ahora en el cese de la violencia cuyo resultado la ONU estima en más de 10.300 muertos.