Generalmente, cuando se despliega un Ejército, suele ser para evitar invasiones de otras fuerzas armados o para desactivar acciones ilícitas, como el narcotráfico. Pero Uruguay ha debido movilizar soldados para luchar contra la 'rana toro', una especie altamente invasiva que provoca un impacto ambiental considerable, según informó el diario El País.
Un contingente de diez militares se encargarán vaciar piscinas y espejos de agua. Luego, con arpones de pesca cazarán a las ranas. Sin embargo, esto no será siempre posible, pues algunas reservas hídricas de este tipo están siendo utilizadas para dar de beber al ganado durante la sequía que azota al país.
El Cecoed no descarta enviar más militares a la zona en caso de que se requiera llevar adelante más tareas. La cantidad de ranas toro es incierta, porque hay más volúmenes de agua que no han sido relevados. En principio, el plan podría llevar varias semanas.
Estos animales, cuyo nombre científico es Lithobates catesbeianos, son originarios de EEUU, pero fueron ingresado a Uruguay para la cría con el fin de comercializar su carne. La actividad fue estimulada por el Gobierno en su momento, pero el negocio no se reveló exitoso.
"Nunca se previó la posibilidad de un fracaso y al haber abandonado los criaderos se escaparon las ranas", explicó al periódico montevideano Richard Fonseca, integrante del Cecoed.
Debido a su mayor tamaño, la rana toro se come a las especies más pequeñas y provoca disrupciones en la cadena alimenticia. El panorama se ve más complicado por la presencia de campos arroceros en la región.