"El Gobierno está en pleno ejercicio del 155 y no va a consentir ninguna ilegalidad", afirmó Méndez de Vigo en su habitual rueda de prensa de los viernes tras la reunión del Consejo de Ministros.
En esas elecciones el independentismo consiguió reeditar su mayoría en escaños, siendo Junts Per Catalunya, candidatura encabezada por el expresidente Puigdemont, la fuerza soberanista más votada.
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Actualmente Puigdemont se encuentra en Bélgica, a donde se llegó a principios de noviembre huyendo de las autoridades españolas luego que los tribunales españoles abrieran una investigación en su contra por alentar desde su cargo un movimiento de "insurrección activa" con el objetivo de proclamar la independencia de Cataluña.
Esta opción es rechazada por todas las fuerzas no independentistas del Parlamento de Cataluña, así como por los servicios jurídicos de la cámara y por el Gobierno de España, que anunció su intención de recurrir la investidura ante la justicia si no es presencial.
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En su comparecencia, Méndez de Vigo señaló en varias ocasiones que el Gobierno no piensa especular sobre las intenciones de Carles Puigdemont, pero insistió en que actuará con "claridad, proporcionalidad y firmeza" si se producen actos "al margen de la legalidad".
Pese a su rechazo a la investidura de Puigdemont, Méndez de Vigo destacó la importancia de que se forme gobierno en Cataluña para que el ambiente de "normalidad en las calles" se traduzca en "normalidad política"
Como en otras ocasiones, Méndez de Vigo aseguró que el Gobierno central está dispuesto a tener unas buenas relaciones con el próximo Ejecutivo catalán siempre que el diálogo entre ambas partes sea "sin fecha de caducidad" y "dentro de la legalidad".