Anteriormente, el 15 de enero Turquía apuntó su artillería contra las fuerzas de las Unidades kurdas de Protección Popular (YPG) en Afrín, en respuesta a un ataque con misiles que lanzaron las YPG la noche del 14 al 15 de enero contra las localidades controladas por el opositor Ejército Libre Sirio en el distrito de Azaz, que tiene frontera con Turquía.
Los medios turcos informaron que Ankara envió también a la frontera con Siria su técnica militar, incluidos los tanques.
El 13 de enero, el presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, advirtió de que el Ejército turco empezará una operación en las regiones de Manbij y Afrín controladas por las YPG, si las milicias kurdas no se retiran totalmente de la zona fronteriza entre Siria y Turquía.
Las YPG, brazo armado del PYD, son para Ankara una extensión del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK), proscrito como organización terrorista en Turquía.