"No es la primera vez que intentan atentar contra Vladímir Putin, se trata de una estrategia de carácter terrorista que busca desestabilizar y sembrar el caos en un conflicto donde, en el plano militar, Rusia ha logrado imponer sus condiciones", expresó Daniel Seixo, sociólogo español, en diálogo con Séptimo Piso.
"Es necesario debatir quiénes están realmente interesados en llevar adelante un atentado; existen sectores en Ucrania que viven política y económicamente de esta carnicería y apuestan a la prolongación del conflicto", afirmó.
El sociólogo comentó que "el foco debe ponerse en la necesidad de aislar y desarticular políticamente a estos actores, responsables de empujar la escalada, antes de que el conflicto derive en consecuencias de alcance global".
"Zelenski no representa hoy a nadie en Ucrania" dijo y añadió que cuando el conflicto llegue a su fin, las propias élites que lo sostienen se volverán contra él, porque dejará de ser funcional a sus intereses", sostuvo.
Por su parte, Jorge Wozniak, historiador argentino, aseguró que "a medida que el conflicto se vuelve más desfavorable para Ucrania, vamos a ver un endurecimiento de este tipo de medidas por parte de Kiev".
"Es obvio que los recursos que van a emplear para tratar de empantanar el campo, dificultar las negociaciones y buscar que el Gobierno ruso tenga una reacción desmedida, van a ser más frecuentes", agregó.
En este sentido, Wozniak aseveró que "Trump es uno de los más interesados en poner fin al conflicto en el mediano plazo". "Los que sí están más involucrados en que el conflicto continúe son determinados grupos dentro de la OTAN, en Europa y de la Unión Europea, como Von der Leyen, Macron y Merz", apuntó.
Por último, indicó que "Zelenski no tiene el control pleno de la situación, ya que hay muchos grupos diferentes con propuestas o intereses distintos, como los ultranacionalistas, los oportunistas y los que le siguen la corriente".
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