Este sarcófago, de unos dos metros de largo, se encuentra en un anexo de dos niveles de la iglesia y se cree que es el posible lugar del entierro original de San Nicolás, quien vivió en la antigua ciudad de Mira —actual Demre— en el siglo IV d.C.
Fue descubierto a una profundidad de entre 1,5 y 2 metros y tiene una tapa elevada con un tejado a dos aguas, de acuerdo con las tradiciones funerarias locales. La proximidad del sarcófago a una iglesia construida en el siglo V d.C., por orden del emperador bizantino Teodosio II, refuerza la idea de que este pudo ser el lugar de descanso original del santo.
"Sobre todo, esperamos encontrar una inscripción en el sarcófago. Esto ayudará a aclarar el contenido del entierro y nos permitirá determinar el período exacto al que se refiere", declaró a Turkiye Today la profesora asociada Ebru Fatma Findik, de la Universidad Hatay Mustafa Kemal, que dirigió el estudio.
Hasta ahora, solo se ha abierto completamente la tapa del sarcófago, pero se espera que las nuevas excavaciones aporten pruebas más definitivas en los próximos meses.

7 de diciembre 2024, 18:11 GMT
La búsqueda de la tumba de San Nicolás, obispo de Mira, comenzó poco después de su muerte en el siglo IV. Durante los primeros siglos, sus restos se localizaron en Mira, donde fue construida una iglesia en su honor.
En el siglo XI, tras la toma de la ciudad por los árabes, algunos de sus restos fueron trasladados a Bari, Italia, donde fue creada la basílica de San Nicolás. Otros restos acabaron en otra ciudad italiana, Venecia, durante la Primera Cruzada. Desde entonces, la ubicación de sus restos ha sido objeto de controversia. En 1953, las investigaciones demostraron que los huesos de Bari y Venecia pertenecían a la misma persona, pero la cuestión de si eran los restos de San Nicolás seguía abierta.
Las excavaciones arqueológicas modernas en la iglesia de San Nicolás de Demre comenzaron en 1989 y aún continúan.
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