"Las perspectivas no son buenas porque la capacidad de disuasión de todos los involucrados ha desaparecido. Los actores han tomado acciones para impedir que otros reaccionen y hasta ahora han fallado. Por ahora, las perspectivas no son buenas porque nadie quiere sentarse a hablar por el alto al fuego en Gaza, que parece haber pasado a un segundo plano", aseguró a Séptimo Piso Luciano Zaccara, profesor investigador del Centro de Estudios del Golfo en la Universidad de Catar.
"El ciclo de represalias va a seguir estando activo, nadie se da por satisfecho y siempre habrá otro escalón más. Alguno tiene que parar o será imposible salir de esto", agregó.
El académico, al mismo tiempo, sugirió que Estados Unidos es el único que podría evitar que Israel siga escalando, pero que también permite que "Israel haga el trabajo sucio de eliminar a los líderes de grupos que los estadounidenses consideran como enemigos en la región. También quedó en claro que el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas es obsoleto y no sirve".
"Desde que empezó esta guerra, Joe Biden dijo cuáles eran las líneas rojas a no cruzar: le pidió a Israel que no la extienda durante meses para evitar llegar a los 30.000 muertos y que no involucre al Líbano, pero lo hizo igual. Ya no hay más líneas rojas que el presidente de Estados Unidos le pueda poner al Gobierno de Benjamín Netanyahu, al que no le importaría bombardear instalaciones nucleares; ya lo ha hecho anteriormente", aseveró.
Para cerrar, Zaccara consideró que mientras no se solucione el problema de fondo, que es Gaza, esto no va a parar. "El conflicto no va a desescalar porque Netanyahu no quiere la formación de un Estado palestino y al mismo tiempo es imposible que elimine la voluntad de resistencia palestina".
"El nuevo gobierno japonés comenzó una estrategia de defensa colectiva similar a la OTAN"
El nuevo primer ministro japonés, Shigeru Ishiba, disolvió este miércoles 9 de octubre el Parlamento con vistas a las elecciones anticipadas del 27 del mismo mes. Además, el líder del Partido Liberal Democrático, tras su asunción, busca reorientar las áreas de la política exterior y de defensa.
"Este nuevo primer ministro representa a un capitalismo más social y establece una cohesión en las regiones que fueron abandonadas para generar un mayor ingreso. Actualmente, hay un alza del 2% de la inflación. Esta cifra es un golpe para los japoneses, que están acostumbrados a la deflación. Además, el nuevo Gobierno busca establecer estrategias de internacionalización porque la tiene difícil con sus competidores regionales como Corea del Sur y China", aseguró a Séptimo Piso Adolfo Laborde Carranco, profesor e investigador del Centro de Investigación y Docencia Económicas de México y diplomático en Japón.
"El país asiático está poco acostumbrado al uso de armamento, pero con la llegada del nuevo Gobierno comenzó una estrategia de defensa colectiva similar a la OTAN con miras a contener a China, que tuvo acciones amenazantes a la seguridad regional y la japonesa", añadió.
En ese sentido, advirtió que Japón reactivó sus ejercicios militares en mares de Asia y estableció nuevos mecanismos de interpretación de su Constitución. "Esta nueva Administración intenta rearmarse para ahuyentar posibles amenazas de China. Esto preocupa al pueblo porque no está acostumbrado a esta narrativa de defensa bélica", concluyó.