"El enemigo fue derrotado con el uso de fuego de artillería, la aviación militar y drones de ataque. Al sufrir pérdidas, el grupo de sabotaje ucraniano se retiró hacia su territorio", indica el comunicado del ente castrense.
La nota precisa que una parte de los ucranianos intentó mantener posiciones en una zona adyacente a la frontera, pero "resultó bloqueada por las unidades del Ejército ruso". Los militares rusos siguen lanzando ataques contra los restos del grupo de sabotaje.
El Ministerio de Defensa también publicó en su canal de Telegram un video que confirma la derrota de los militares ucranianos.
Este 6 de agosto, el Servicio Federal de Seguridad de Rusia (FSB, por sus siglas en ruso) informó de bombardeos ucranianos lanzados contra localidades fronterizas de la provincia de Kursk, y afirmó que sus agentes no permitieron ninguna incursión en la frontera estatal.
Según los datos del Ministerio de Defensa ruso, hasta 300 militares ucranianos, apoyados por 11 tanques y 20 vehículos blindados, atacaron este territorio ruso.
El presidente del Comité de Investigación de Rusia, Alexandr Bastrikin, ordenó abrir un caso penal por el ataque contra la provincia de Kursk y precisó que fueron atacados los edificios residenciales y administrativos, junto con las instalaciones de infraestructura civil.