Un nuevo proyecto de gas firmado entre Rusia e Irán tiene perspectivas de ramificaciones en toda la región, incluida la India, comentó el experto.
"La India es un gran mercado para el gas natural, que además sigue creciendo", señaló, argumentando que hay mucho espacio tanto para el gas ruso como para el iraní en el mercado indio.
Yushkov mencionó la posibilidad de que Irán exporte gas ruso a Europa a través de Turquía. No obstante, el paso puede resultar arriesgado si se tiene en cuenta la intención declarada por el continente europeo de dejar de utilizar combustibles fósiles para 2050. Así, al analista le parece más probable que Asia y la India sean los destinatarios finales del gas ruso exportado a través de territorios iraníes.
Sin embargo, para que este proyecto ruso-iraní se lleve a cabo con éxito, habrá que sobrepasar una serie de retos como el de la construcción de un gasoducto submarino a través del mar Caspio para transportar gas natural directamente de Rusia a Irán. Eso requeriría el consentimiento de todos los Estados ribereños del Caspio, incluidos Azerbaiyán, Kazajistán y Turkmenistán (además de Rusia e Irán).
A su vez, el experto del Fondo Nacional de Seguridad Energética, Stanislav Mitrajovich, destaca que Irán tiene mucho gas natural propio y sugiere que el nuevo proyecto de gasoducto probablemente tenga como objetivo exportar el producido por Rusia a la India.
"Es posible construir un gasoducto de Irán a la India", sostuvo, destacando lo beneficioso para Rusia que podría ser adquirir a la India como alternativa a China en términos de mercado para el gas natural ruso.
Además, Mitrajovich señaló que la iniciativa requeriría o bien llegar a un acuerdo con Pakistán —si el gasoducto de Irán a la India atravesara ese país— o bien construir una tubería submarina directa desde la costa iraní a la india.
¿Qué se sabe del acuerdo sobre el gas?
El ministro iraní de Petróleo, Javad Owji, anunció el 22 de julio que Moscú y Teherán alcanzaron un acuerdo estratégico sobre las exportaciones de gas ruso a Irán.
"Con este acuerdo, la cuota de Irán en el comercio aumentará, lo que provocará cambios en los equilibrios internacionales. En otras palabras, el acuerdo supondrá una revolución en el panorama energético e industrial de la región", declaró el ministro, citado por Al Mayadeen.
Aunque esta iniciativa aún no ha superado la fase de memorando de entendimiento, la prensa ha logrado conocer algunos detalles del acuerdo firmado entre el gigante energético ruso Gazprom y la Compañía Nacional de Gas de Irán.
Bajo los auspicios de este acuerdo, Irán podría empezar a recibir importantes cantidades de gas natural ruso, posiblemente hasta 300 millones de metros cúbicos al día o casi 110.000 millones de metros cúbicos al año, lo que supone casi el 45% del consumo actual iraní de ese recurso energético y equivale aproximadamente al rendimiento máximo de los gasoductos Nord Stream 1 y 2, ya paralizados.
El proyecto también incluirá la construcción de una tubería de gas natural a través de Irán, "de norte a sur", con unos ingresos anuales estimados de entre 10.000 y 12.000 millones de dólares, informó la agencia de noticias iraní IRNA citando a la empresa Owji.
Según Asharq Awsat, el proyecto consistiría en desarrollar un gasoducto submarino a través del mar Caspio, desde Rusia hasta Irán. La iniciativa, si se pone en marcha, podría requerir la coordinación con los Estados fronterizos de Turkmenistán, Azerbaiyán y Kazajistán.
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