Durante el periodo de la planeada recomposición de las capacidades de combate de las Fuerzas Aerotransportadas rusas, las unidades de asalto realizan entrenamientos de operaciones nocturnas contra posiciones enemigas y mejoran sus capacidades en el manejo de distintas armas, desde armas ligeras hasta ametralladoras y sistemas antitanque.
El ente militar hace hincapié en que los instructores encargados de garantizar la cohesión de las tropas y de formar nuevas competencias constituyen personal militar con amplia experiencia de combate.
Como la cohesión constituye un factor crucial que afecta a todo el resultado de la misión, a lo largo del entrenamiento de las operaciones de asalto y de repliegue nocturno se presta especial atención al nivel de interacción del personal, la precisión y la eficacia de la utilización de los dispositivos especiales de imagen térmica y de visión nocturna.
El video muestra a los militares rusos que se mueven en pequeños grupos al amparo de ametralladoras de gran calibre Kord y lanzagranadas automáticos AGS-17 Plamia.
"En el colectivo somos todos hermanos (...). Todos nos apoyamos. Estoy totalmente dispuesto a confiarme [a ellos], sé que me cuidarán la espalda en cualquier caso y me rescatarán. Y yo los rescataré a todos. En cualquier caso, la victoria será nuestra", afirmó un militar ruso entrevistado.
Rusia lanzó la operación militar especial para defender las repúblicas populares de Donetsk y Lugansk, previamente reconocidas por Moscú como Estados soberanos, frente al genocidio cometido por parte de Kiev. Uno de los objetivos fundamentales de la operación militar especial es la desmilitarización y desnazificación de Ucrania.