En ellos se muestra el despliegue de los obuses autopropulsados 2S5 Giatsint-S de 152 mm. En las imágenes podemos apreciar los preparativos para lanzar un fuego arrollador contra las posiciones enemigas y una rápida retirada tras realizar de media cinco o seis disparos en un minuto.
Esta parte del ataque es la más vital, pues ambos bandos disponen de radares especiales que detectan los puntos de procedencia de proyectiles de artillería, lo cual permite realizar un contraataque con mucha rapidez.
Por lo tanto, la movilidad lo es todo en el campo de batalla.