Esta vez, el protagonista del incidente ha sido un F-35B que tuvo un aterrizaje vertical desafortunado en el estado de Texas durante un vuelo de pruebas. Como vemos en las imágenes, el avión tuvo un aterrizaje algo brusco, razón por la cual rebotó de la pista y, al parecer, se desequilibró el empuje entre la tobera central y la principal.
Como resultado de ello, el avión chocó violentamente con el morro contra la pista y se descontroló. En cuanto el caza se colocó en una posición horizontal, el piloto tomó la decisión de eyectarse.
Este ya es el tercer accidente de un F-35 que ocurre en los últimos tres meses. El anterior fue durante un vuelo de demostración, cuando uno de estos cazas se estrelló. Eso sí, el incidente ha sido más cómico que trágico: tras realizar un aterrizaje de emergencia, el F-35 estaba siendo remolcado y en este instante se plegó su pata delantera del tren de aterrizaje.
Otro 'accidente de quinta generación' ocurrió recientemente con el bombardero B-2 Spirit, que tuvo que realizar un aterrizaje de emergencia y se prendió fuego ya en tierra.
3 de diciembre 2022, 03:59 GMT