Según los medios, los hechos ocurrieron en un parque en Taiwán, dónde el hombre había ido con la pequeña para mostrarle los animales. Sin embargo, un ganso atacó a los visitantes para defender su territorio.
Como podemos apreciar en las imágenes, el hombre no perdió la cordura, agarró a su nieta y la balanceó de tal modo, que golpeó con su pie contra la cabeza del ganso, que tras haber recibido una patada con tanta precisión, decidió retirarse del campo de batalla.
Aunque parezca que sea un mal abuelo que usa a su nieta como un escudo, los medios locales destacan que un día antes otra niña había sido atacada por los gansos, que la mordieron, razón por la cual, se considera que el abuelo en realidad defendió a su nieta.
Al mismo tiempo, hay quienes criticaron al hombre, diciendo que si un animal se muestra agresivo no hay que pegarle, sino que simplemente hay que retirarse de su territorio.