Muchos países han adaptado —según sus gustos e ingredientes típicos—, al reconocido hot dog o perro caliente originario de la Nueva York de mediados del siglo XIX, bautizado por la analogía entre los perros de raza Dachshund —conocidos de forma coloquial como salchichas—, con el principal ingrediente, una salchicha estilo Frankfurt.
En el caso de América Latina, este bocadillo difiere en nomenclaturas e ingredientes según la latitud en la que se lo prepare. Lo que los chilenos conocen como 'completo', los rioplatenses lo llaman 'pancho', en Nicaragua le llaman 'jocho', 'shuco' en Guatemala o 'pan con perro' en Cuba.
El completo chileno es —como todas las versiones—, una adaptación del hot dog neoyorkino que contempla un pan con una salchicha estilo Frankfurt, denominada en Chile como vienesa.
La gran diferencia es que va acompañada de chucrut, una salsa llamada 'americana' provista de pepinillos y zanahorias en escabeche picadas, mayonesa y mostaza.
La segunda versión del completo es la conocida como 'completo italiano', que acompaña el pan y la vienesa con tomate, palta y mayonesa, recreando los colores de la bandera italiana, razón de su nombre. Se trata de la variedad más popular en la actualidad.
Tanto el completo común como el italiano son servidos en la mesa de los bares con frascos de salsa ketchup, mostaza, mayonesa y salsas de ají rojo.
¿Por qué se celebra el 'Día del completo' en Chile?
La celebración del 'Día del Completo' se remonta a 100 años atrás, cuando Eduardo Bahamondes, dueño del aún existente Bar Bahamondes del Portal Fernández Concha de la Plaza de Armas —en el kilómetro cero del país—, introdujo la versión criolla del hot dog estadounidense en la década de 1920.
Otra versión le adjudica el origen de la conmemoración a otro bar de la capital chilena, el Bar Dominó, que introdujo promociones para su aniversario en 2009, lo que terminó convirtiéndose en una fecha de ofertas en distintos bares del país.