Desde Moscú culpan a Occidente de hacer la vista gorda ante los argumentos que desmienten la versión de Kiev sobre lo sucedido. Como prueba, el representante de Rusia ante Naciones Unidas, Vasili Nebenzia, señaló la negativa de Reino Unido —que preside de manera rotatoria el Consejo de Seguridad de la ONU— a convocar una reunión para presentar los argumentos rusos.