España posee más de un millar de islas. Tan solo 11 de ellas son de gran tamaño, mientras que el resto apenas superan la hectárea de extensión. En su mayoría, pequeños peñascos que emergen del mar a la vera del litoral. Así lo dispuso la naturaleza. Eso sí, esta no es la única que tiene capacidad de decisión sobre la disposición del territorio.
En los últimos años, el ser humano no solo ha sorteado los distintos accidentes geográficos. Además de construir puentes, túneles o carreteras, también ha levantado islas. Por ejemplo, el golfo pérsico se ha copado de archipiélagos artificiales sobre los que reposan viviendas, hoteles y centros comerciales. Más tiempo lleva Países Bajos ganando terreno al mar en provincias como Flevolanda. También Japón, que colocó el aeropuerto de Osaka sobre una creación de hormigón en medio de la bahía de la urbe. En el caso de España, la fiebre por erigir ínsulas es menor. Sin embargo, hay propuestas.
Embarcaciones en el puerto de Alicante
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Alicante acogerá una de ellas. El puerto de la ciudad será escenario de una isla artificial. En concreto, en la bocana de entrada de la dársena inferior del puerto. Punto desde donde se podrá contemplar el mar Mediterráneo en una dirección y el casco urbano y el Castillo de Santa Bárbara en otra. Será la segunda isla de Alicante, cuyo gobierno local rige sobre la isla de Tabarca. Eso sí, esta es de origen natural.
El proyecto atañe a la Autoridad Portuaria. El organismo ya ha adjudicado a la empresa Vías y Construcciones las obras de la estructura por valor de 2,1 millones de euros y cinco meses de plazo. En las manos de la entidad está la instalación de tres grandes pilotes de hormigón de 14 metros para garantizar la estabilidad de la isla.
Más allá de los detalles básicos de construcción, por el momento, se conocen pocos datos sobre la nueva ínsula, pero sí su misión. Y es que sobre esta se ubicará un restaurante. Es más, la institución tiene previsto convocar un concurso público para la creación y gestión del local.
Bocana del puerto de Alicante, donde se construirá la isla artificial
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La gastronomía será la protagonista del próximo vecino del puerto de Alicante. Para probar los platos en esta plataforma flotante los comensales tendrán que montarse en un transbordador. La embarcación también saltará a la dársena más exterior. La intención es que se pueda recorrer toda la zona portuaria, desde el Muelle de Levante hasta el Muelle de Poniente.
Alicante no es el primer enclave español en el que se proyectó algo similar. En 2007, Valencia estuvo a punto de contar con un barrio sobre las aguas del Mediterráneo. El grupo inmobiliario Redis presentó el proyecto Isla Luna, centrado en la construcción de 1.000.000 metros cuadrados de tierra sobre el mar. Al más puro estilo Dubái, la isla albergaría viviendas, pero también campo de golf, discotecas, hoteles de lujo, balnearios, cines o restaurantes. Sin embargo, la propuesta se topó con la ley de costas. En Alicante se prevé que esto no suceda.