Ante todo, es necesario elegir el origen de la grasa que usarás: vegetal o animal. De acuerdo con la nutricionista rusa Olga Kovinenko, la primera opción es la mejor. Está comprobado científicamente que las grasas vegetales son mejores para la salud —e incluso para la apariencia— que las animales, subraya la profesional.
Si deseas freír algo, las opciones más saludables son las grasas duras, las cuales suelen tener un alto punto de humeo, apunta Kovinenko. Una opción que se ha vuelto muy popular en los últimos años es el aceite de coco. También recomendados en este caso son el ghee —mantequilla clarificada— y la manteca de pato.
Para aderezar ensaladas y otros platos fríos, la opción más saludable, según la nutricionista, son los aceites de extracción en frío.
Estos aceites "no se calientan, por lo que se trata de un producto absolutamente natural con la conservación de los beneficios de la propia naturaleza", dijo Kovinenko a Sputnik.
Además del ya conocido aceite de oliva, la especialista enumeró diversas otras opciones de grasas de extracción en frío. Son ellas: el aceite de semilla de calabaza, el aceite de linaza, el aceite de semilla de comino negro, el aceite de semilla de uva, el aceite de almendra, el aceite de cedro y el aceite de nueces.
La nutricionista recomendó también los triglicéridos de cadena media, también conocidos por sus siglas en inglés MCT.
"Este es una especie de aceite dietético con triglicéridos de cadena media, los cuales no se almacenan en las reservas de grasa, sino son absorbidos por el cuerpo rápidamente", explicó Kovinenko.
El aceite MCT, según la especialista, tiene un efecto beneficioso sobre el metabolismo, reduce el apetito y mejora el funcionamiento del tracto gastrointestinal. Además, reduce colesterol y ayuda en la absorción de magnesio y calcio. También es antioxidante y fortalece el sistema inmunológico, concluyó la nutricionista.
Sputnik, por un cuidado de salud responsable
Las opiniones expresadas por los expertos en este artículo se comparten únicamente con fines educativos e informativos, y no pretenden servir como diagnóstico o tratamiento médico universal. Sputnik señala la necesidad de consultar a un especialista antes de poner en práctica cualquiera de los consejos aquí publicados.