El Departamento de Policía de este condado abrió una investigación interna luego de que se difundieran en redes sociales y en cadenas de televisión una serie de imágenes en las que aparece un agente activando su pistola contra la mascota de una familia.
De acuerdo con reportes de medios estadounidenses como NBC o Telemundo, los oficiales arribaron al lugar por una queja vecinal de "ladridos de perros".
Cuando uno de los policías se acercó para averiguar qué sucedía, un perro American Bully salió de una casa y se acercó a él sólo para olerlo, sin emitir ningún ladrido, según se observa en la videograbación. Sin embargo, aunque el animal no adopta una postura de ataque, el policía ya había sacado el arma de su funda.
En el video se escucha cómo el agente grita: "¡Señor, agarre el perro!". No obstante, la mascota se retira y se dirige hacia el otro policía que está abajo de la patrulla. A él sí le ladra. En segundos, el primer policía se dirige a la zona donde está el perro y, cuando tiene oportunidad, dispara siete veces contra él.
Tras escuchar el tiroteo, un hombre y una mujer salen de una casa; aparentemente son los dueños del American Bully. Al percatarse que el perro está tirado en la calle, ella rompe en llanto y él le grita al agente, quien justifica su acción al asegurar que "el perro se me vino arriba".
"Este incidente no debería haber sucedido si el oficial hubiera estado entrenado apropiadamente. Este cachorro de 8 meses, Alpha, no se mostró agresivo y no merecía morir así", acusó el colectivo Miami Coalition Against Breed Specific Legislation en un comunicado difundido por Telemundo.
Las imágenes siguen circulando en internet e incluso hubo quien subió videos de Alpha mientras convivía con la familia que lo había arropado desde muy cachorro.