Esta innovación tecnológica permite que el coche sea gris oscuro en un momento y blanco al siguiente, de tal manera que el color secundario se arrastra lentamente por la carrocería al momento de cambiar de color.
El proyecto de I+D está basado en la tecnología electroforética. Se trata de una envoltura que tiene incrustada millones de microcápsulas con pigmento blanco con carga negativa y pigmento negro con carga positiva. Dependiendo de la configuración, el coche reaccionará a una carga eléctrica que permitirá a uno de los pigmentos elevarse a la parte superior de la microcápsula.
Según BMW, su tecnología E-Ink aplicada en el iX Flow es una cuestión de vanidad, aunque tiene ciertas funciones interesantes que ningún otro coche podría tener. Por ejemplo, si un usuario pierde este coche en un estacionamiento, puede comenzar a cambiar de color de forma constante para que pueda ser detectado fácilmente sin emitir ningún tipo de sonido.
Además, el coche puede cambiar de color según el clima, las condiciones de tráfico o simplemente con el estado de ánimo del conductor.
4 de enero 2022, 13:16 GMT
Si bien el modelo ya apareció oficialmente, aún no está listo para su producción. Por el momento, esta versión solo puede intercambiar dos colores, pero en un futuro las opciones podrían ser más variadas y amplias.