Este monstruo de una tonelada lanzado por China en junio pasado promete ser una revolución en la fotografía espacial.
Lo más impresionante de este satélite es que puede tomar fotografías en movimiento. La mayoría lo consigue sólo si se mantiene estático; de lo contrario, se obtienen imágenes de muy mala calidad, según informó el diario chino The South China Morning Post.
Beijing-3 es actualmente el satélite fotográfico civil más avanzado del mundo. El Gobierno de China asegura que, en días recientes, logró fotografiar 3.800 kilómetros cuadrados de la Bahía de San Francisco. Esa superficie equivale a 2.5 veces la Ciudad de México.
Los resultados del satélite, publicados en la revista china Spacecraft Engineering, arrojan que las imágenes obtenidas son de alta resolución, al punto que una persona podría ser capaz de identificar características de vehículos militares y las armas que estos transportan, algo que en sistemas como Google Maps o Google Earth no se puede hacer.
El Beijing-3 funciona con inteligencia artificial y puede capturar hasta 500 extensas zonas geográficas en un día.
Sin embargo, su capacidad todavía es menor a la del satélite estadounidense Worldview-4, que dejó de funcionar en 2019 y que conseguía imágenes de alta resolución, de hasta 30 centímetros por pixel.