Según informó la Policía Nacional a través de un comunicado, el detenido ""ejercía una intensa actividad en redes sociales, manteniendo contactos frecuentes con terroristas asentados en zona en conflicto".
La investigación comenzó a raíz de otro operativo, realizado en mayo de 2020, donde se detuvo a dos personas por adoctrinamiento terrorista.
Fruto de esa operación se detectó a un ciudadano de origen magrebí que seguía las mismas directrices de actuación que los arrestados, orientadas a la captación de nuevos adeptos para la organización terrorista ISIS (acrónimo árabe de Estado Islámico, proscrito en Rusia).
En el transcurso de la investigación se detectó cómo el detenido profesaba "una intensa actividad proyihadí", entre la que se incluía no solo un consumo continuado de material terrorista sino también "el contacto frecuente con miembros de grupos terroristas en Oriente Medio".
"El ahora detenido tenía escasas relaciones personales en el plano físico, y dedicaba gran parte de su tiempo al consumo de contenidos yihadistas, desde los idóneos para cometer acciones terroristas, hasta otros de extrema crudeza donde se visualizaban ejecuciones dirigidas por ISIS", señala el comunicado de la Policía Nacional.
El detenido, al que se acusa de presunta participación en delitos de auto adoctrinamiento y adocrinamiento activo, ya fue puesto a disposición de un juzgado de instrucción, que ordenó su ingreso en prisión provisional.