"Las nuevas acusaciones, al parecer, fueron hechas para mantener la presión contra nuestro país. Vamos a rechazarlas", indicó la portavoz de la Cancillería rusa, María Zajárova, en declaraciones al canal de YouTube 'Soloviov Live'.
El 15 de noviembre, las fuerzas rusas realizaron el ensayo previsto de un avanzado sistema que impactó en un satélite inoperativo.
Washington inmediatamente acusó a Moscú de efectuar pruebas que amenazan "los intereses de todas las naciones".
El ensayo ruso se produjo ante el secretismo que guarda Estados Unidos en torno a las pruebas de su misterioso transbordador espacial X-37B, también denominado Vehículo de Prueba Orbital (OTV, por sus siglas en inglés).
El proyecto dirigido por el Pentágono ha realizado desde 2010 a la fecha seis lanzamientos de las naves X-37B. El último en mayo de 2020 y el transbordar lleva ya más de 500 días en la órbita terrestre.
Zajárova enfatizó que Rusia siempre ha increpado a Estados Unidos su rumbo hacia el uso del espacio con fines militares.