Estos cuatro frutos secos son los más comunes y nutritivos. Según la Mikityuk, su valor alimenticio radica en que tienen tres veces más fibra, vitaminas y minerales que la fruta fresca, por lo que pueden satisfacer un mayor porcentaje de la cantidad diaria recomendada de nutrientes.
"Las uvas pasas contienen mucho potasio, vitaminas del grupo B, gracias a las cuales pueden reducir la presión arterial, así como reducir la inflamación en el cuerpo. Las ciruelas son un laxante natural. También son ricos en potasio, fibra y vitaminas A y K, y ayudan a combatir la osteoporosis", explicó.
Otra de las ventajas de estos frutos secos es su alto contenido en polifenoles, que son potentes antioxidantes, útiles para el funcionamiento del organismo.
"Los dátiles es una fuente importante de hierro, potasio y fibra. Lideran la lista de los alimentos ricos en antioxidantes que contribuyen a la reducción de los daños causados en el organismo. En los últimos meses del embarazo contribuyen a la dilatación del cuello uterino. Mientras que los albaricoques pueden prevenir enfermedades oculares. Al ser rico en fibra, potasio y vitaminas A y C es capaz de aportar el 47% de la cantidad diaria de vitamina A, que es buena para nuestra piel y nuestros ojos".
Sin embargo, la nutricionista recordó que los frutos secos conservan todas las calorías de la fruta entera, por lo que es importante vigilar la cantidad ingerida porque de lo contrario se puede ganar peso fácilmente.