Se trata de sedimentos oceánicos que se hallaban depositados en el fondo marino antes de la formación del archipiélago canario, hace unos dos millones de años. Tal es la suposición de un equipo de cinco investigadores del Instituto Geológico y Minero de España (IGME-CSIC), que ha recogido varios fragmentos para proceder a su análisis en el laboratorio.
Estos especialistas llevan un mes presentes en La Palma, adonde se desplazaron provistos de un equipo portátil de rayos X para determinar la características del magma mediante un análisis de la composición de la ceniza, la lava y el lapilli, que es la lava en forma de perdigones. A falta de los resultados del proceso de verificación en el laboratorio, el vulcanólogo Vicente Soler aventura que los fragmentos que está expulsando el volcán pueden clasificarse como sedimentos oceánicos anteriores a la formación de la isla, un tipo de roca ya detectada en la erupción en 2011 del volcán submarino Tagoro, en la vecina isla de El Hierro, y que se dio en llamar restingolita.
El fenómeno parece ser común en todos los procesos eruptivos ocurridos en las Islas Canarias. En el del volcán Tihuya en 1585, también en La Palma, el ingeniero y cartógrafo Leonardo Torriani ya describió el surgimiento de cuatro bloques del tamaño del campanario de una iglesia, lo que en la actualidad se conoce como "Los campanarios de Jedey".
No es una novedad
Durante las fases de mayor intensidad eruptiva, se ha podido ver cómo grandes bloques de roca discurrían como flotando por las coladas de lava, sin llegar a fundirse con ella. Son trozos de roca preexistentes, expulsados por el volcán. Pero no es un fenómeno nuevo, aunque sí lo fue en el caso del volcán submarino Tagoro en 2011. En cualquier caso, Soler admite que la cuestión es objeto de debate científico y todavía hay discrepancias entre los especialistas.
Mientras tanto, el volcán y la actividad sísmica no dan tregua. En la noche del 14 de octubre la lava se desbordó del cono principal, si bien el avance de la lava parece haberse ralentizado luego de tragarse un supermercado y arrasado un campo de fútbol.
Según datos actualizados por el servicio de vigilancia volcánica del Instituto Geográfico Nacional (IGN-CNIG), de los 66 terremotos localizados en las últimas 24 horas en la zona afectada por la reactivación del volcán de Cumbre Vieja, cuatro se han dejado sentir. Uno de ellos, de magnitud 4,5 (mbLg) con hipocentro a 36 km de profundidad y ocurrido a las 7:02 UTC del 15 de octubre, ha sido perceptible en toda la isla. La altura de la nube de dispersión alcanzaba los 4.000 metros de altura a primera hora de la mañana.
Drones altruistas al auxilio de unos perros en La Palma rodeados por la lava desde hace días | Vídeo
14 de octubre 2021, 16:31 GMT