"Para mañana viernes se esperan valores en torno a los 42ºC en los valles de la meseta sur y los 44ºC en el valle del Guadalquivir [en la comunidad autónoma de Andalucía, al sur de la Península Ibérica]", explica la AEMET en un comunicado.
Para este 12 de agosto se espera que los termómetros alcancen los 40 grados en amplias zonas del interior de la Península Ibérica e incluso se prevé llegar a los 42 grados en zonas de Lleida (Cataluña) y Zaragoza (Aragón), donde las autoridades locales ya han activado las alertas de riesgo extremo por altas temperaturas.
Rubén del Campo, portavoz de la AEMET, destacó que España atraviesa "un episodio muy adverso que aconseja extremar las precauciones", ya que esta ola de calor es la "más intensa, extensa y duradera de lo que llevamos de verano".
Este episodio de ola de calor lleva aparejada la presencia de polvo en suspensión debido al gran recorrido que la masa de aire realizó por el desierto del Sáhara antes de llegar a territorio español, lo que unido a las altas temperaturas aumenta el riesgo de incendios.
Asimismo, según destaca la AEMET, la ola de calor trae consigo la posibilidad de tormentas secas que podrían ir acompañadas de fuertes rachas de viento, granizo y abundante aparato eléctrico.
La previsión del ente meteorológico es que la ola de calor empezará a remitir el 15 de agosto en áreas del norte de España, generalizándose el descenso de temperaturas durante la jornada del martes 17.