El órgano federativo informó en un comunicado que el futbolista abandonó "la concentración de la selección nacional en un vehículo medicalizado, siguiendo con todos los protocolos sanitarios establecidos", según reza textualmente la nota.
"La concentración de la Selección nacional seguirá con todas las rutinas de trabajo establecidas en situaciones de COVID-19", añade la RFEF que habla de "entrenamientos personalizados" y de un entrenamiento este miércoles a las 11:00 (9:00 GMT) de la llamada "burbuja paralela".
En este último grupo se integran seis jugadores llamados por el seleccionador Luis Enrique Martínez, después de que se conociera el primer positivo del mediocentro Sergio Busquets, en la noche del 6 de junio y que actúan como plan de contingencia, en caso de que se sigan produciendo bajas en el equipo que debuta el 14 de junio en la Eurocopa frente a Suecia.
Desde que se conociera el primer positivo en el combinado español, se generó un agitado debate en la sociedad española sobre la conveniencia o no de vacunar a los internacionales españoles, algo que el Gobierno sí hizo con los deportistas olímpicos seleccionados para los Juegos de Tokio.
En la jornada del 9 de junio se espera que las autoridades sanitarias españolas anuncien una decisión definitiva sobre este asunto, después de que se reunieran y no alcanzaran un acuerdo.