WhistlinDiesel compartió sus extremas pruebas en YouTube con las que pretendió simular todos los golpes y abusos que podría recibir el Hilux en décadas de uso: todo ello en un solo día.
Empezó por algo tan rutinario como dar un portazo: el lado del pasajero delantero se rindió con facilidad, pero el trasero aguantó hasta 1.000 ciclos de duros portazos y siguió vivo. De hecho, los portazos eran tan fuertes, que incluso dejaron abolladuras en la carrocería del auto.
Además, los paneles de las puertas empezaron a ceder, junto con los adornos de goma. El portón trasero también recibió la misma cantidad de golpes, pero sobrevivió a esta tortura.
Pero todo eso fue solo el comienzo. WhistlinDiesel sometió al Hilux a una prueba extrema fuera de la carretera, que podría haber destruido fácilmente su suspensión. Y lo que es peor, se cargó un palé de bloques de hormigón —que pesan ni más ni menos que 1.200 kilos— en la plataforma, algo que está muy por encima de la capacidad de carga útil de esta camioneta de tamaño medio.
También sometió a unas pruebas extremas el interior del auto, que tampoco cedió a las torturas. Y si aún no estás convencido de que el Hilux es indestructible, el bloguero prometió publicar incluso más pruebas extremas para ver hasta dónde puede llegar esta camioneta.