Repsol amplía horizontes en Estados Unidos. La compañía española se ha hecho con el 40% de Hecate Energy, una empresa dedicada al desarrollo de proyectos fotovoltaicos y de baterías para el almacenamiento de energía. Para ello, la entidad ha desembolsado 250 millones de euros.
Este es el primer paso de Repsol dentro del mercado de las energías renovables en Estados Unidos. Una operación que permite ampliar el peso y diversificación geográfica del área de energía limpia del gigante con base en Madrid. Y es que Hecate Energy es poseedora de uno de los mayores portafolios del país norteamericano. En concreto, sus proyectos suman más de 40 gigavatios. De estos, 16,8 gigavatios corresponden a proyectos que se encuentran en una fase avanzada de desarrollo y 4,3 gigavatios están asociados a Hecate Grid, una plataforma de baterías para el almacenamiento de energía. Además, la mayor parte de los activos de la empresa se sitúan en los mercados eléctricos de ERCOT, WECC y PJM, los tres de gran crecimiento en la próxima década gracias a los objetivos de reducción de emisiones de los estados que los integran.
Repsol ha destacado que la compra está en línea con su intención de elevar la generación de energías verdes y de incrementar su presencia en otros países. El plan estratégico de la petrolera pasa por alcanzar una capacidad de generación de 7,5 gigavatios en 2025 y 15 gigavatios en 2030. El acuerdo con Hecate Energy favorecerá el cumplimiento de estos objetivos.
"Con esta adquisición entramos en el mercado renovable de Estados Unidos con el mejor socio posible y avanzamos en nuestro objetivo estratégico de ser un operador global de bajas emisiones. Seguimos demostrando nuestra apuesta por la multienergía y dando pasos en la transformación de Repsol para ser compañía cero emisiones netas".
Pasados tres años del cierre de esta transacción, Repsol tendrá la posibilidad de hacerse con el accionariado de la empresa al completo. Se trata de la segunda intervención de la empresa en renovables fuera de España. La primera llegó tras firmar un acuerdo con el Grupo Ibereólica para acceder a su cartera de proyectos en Chile de 1,6 gigavatios, que podrán llegar a 2,6 en 2030. Además, también participa en el parque eólico flotante Windfloat Atlantic, situado en la costa norte de Portugal.