"El MiG-35 puede utilizar toda la gama de armas para la aviación existentes [de fabricación rusa], incluidos los modelos avanzados. Gracias a las nuevas capacidades de combate, este avión se ha convertido en un sistema de aviación eficaz para hacerse con la superioridad aérea", señala Mushegh Baloyan, el portavoz de la compañía.
De acuerdo con Baloyan, en términos de armamento y equipamiento, el MiG-35 supera en todo a su predecesor, el MiG-29. "Goza de nuevas estaciones de radar y de ubicación óptica, un nuevo sistema de designación de objetivos montado en el casco, misiles aire-aire y aire-tierra modernos, una amplia gama de bombas, tanto de caída libre como corregidas", explicó.
El nuevo avión de combate también ha conservado las ventajas de sus predecesores: es fácil de mantener y es capaz de despegar desde pistas no preparadas.
Actualmente los MiG-35 están sometiéndose a las últimas etapas de testeo. Ya han recibido una conclusión preliminar que permite iniciar la producción de un lote inicial. Después de que finalicen las pruebas, los pilotos del grupo de acrobacias aéreas Strizhí serán los primeros en recibir los nuevos cazas.