En un corto vídeo, compartido en las redes sociales, la mujer mostró en detalle el curioso método:
Las imágenes muestran cómo la bloguera abre un recipiente de vidrio, lleno de agua y cubierto con una tapa y una hoja de papel. Luego muestra que la lechuga aún está fresca y crujiente, aunque pasó más de un mes en el frigorífico.
La mujer explicó más tarde que lo ideal es cambiar el agua cada uno o dos dias, aunque si te vas de vacaciones, simplemente tienes que cambiarla "los primeros días, después de lo cual puedes dejarla en el agua una buena semana".
Agregó que el truco también le ayuda a prolongar la corta vida de verduras como el rábano, las zanahorias o el apio.
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