El as del volante español continuará hospitalizado como mínimo hasta el 14 de febrero tras sufrir un atropello en el casco urbano de la ciudad de Lugano, cerca de su residencia, mientras circulaba en bicicleta. Un vehículo lo embistió en una rotonda de la Vía La Santa y salió volando por los aires, golpeándose el torso y la cara.
Tras recibir los primeros auxilios, ser diagnosticado en un centro hospitalario de la ciudad y descartarse lesiones graves en la cabeza mediante pruebas radiológicas, se decidió el traslado de Alonso a un centro más especializado en Berna, donde fue sometido a una operación para recolocar su mandíbula superior, fracturada. Durante la misma se le retiraron algunas piezas de su dentadura, que necesitará del alojo de implantes. Según informó su actual equipo ‒Alpine 1‒ a través de su cuenta oficial en Twitter, los cirujanos se muestran satisfechos con el resultado de la operación y su evolución.
El suceso, que está siendo investigado por la policía local ‒que ha determinado que el autor del atropello es un ciudadano suizo de 42 años de edad residente en Lugano‒, se ha producido cuando apenas falta un mes para el inicio de los entrenamientos de pretemporada (del 12 a 14 de marzo).
La escudería francesa Alpine 1 afirma que Fernando Alonso podrá ir incorporándose progresivamente a su actividad profesional tras unos días de descanso y recuperación. El Mundial de Fórmula 1 comenzará el 28 de marzo con la disputa del Gran Premio de Bahréin, competición que jalonará el regreso del piloto asturiano tras un paréntesis de dos años en la máxima competición del motor.
En 2009 Fernando Alonso sufrió también un accidente en vísperas de la disputa del Mundial. En aquella ocasión, su jet privado se salió de la pista de despegue del aeropuerto de Malindi (Kenia) y un ala llegó a chocar contra uno de los edificios de la instalación. Por fortuna, todos los ocupantes resultaron ilesos.