Durante el experimento, diecinueve personas sanas consumieron polvo de uva liofilizado durante dos semanas. Resultó que su protección natural de la piel aumentó en un 74,8%.
Los compuestos polifenólicos naturales que contienen las uvas reducen el daño causado por los rayos UV en las personas sanas, explicaron los científicos.
"El consumo de uvas puede actuar como un protector solar comestible. Esto no significa que las uvas deban utilizarse en lugar de la protección solar, pero pueden ofrecer una protección adicional", afirmó Allen Oak, autor del estudio.
Asimismo, los científicos indicaron la eficacia para las quemaduras graves del uso de extracto de semilla de uva, que contiene una gran cantidad de potentes antioxidantes. También las uvas pueden reducir el número de proteínas en el cuerpo que causan inflamación y además restaurar los daños del ADN.
Los resultados preliminares también muestran que las uvas ayudan a prevenir el cáncer de piel, pero se necesita más investigación en este ámbito, señalaron los autores del trabajo.
El estudio se publicó en el Journal of the American Academy of Dermatology.