En esta ciudad cercana a la capital española la realidad ha superado a la ficción. Esta pareja urdió un plan que podría parecer descabellado, pero que llevó a cabo con éxito.
Primero la mujer entró en el establecimiento y metió dos patas de cerdo en un carro para llevarlas al punto acordado con su compinche para sustraerlas. Una vez situadas donde habían planeado, el hombre lanzó una cuerda desde el piso de arriba que la mujer se encargó de atar a los jamones.
Segundos después se puede ver cómo los productos de lujo ascienden al lugar donde se encuentra el hombre mientras la mujer se aleja. Mientras ocurre todo esto, otros clientes pasan a centímetros de los ladrones, pero esto no parece incomodarlos.
Aunque no se puede ver en el vídeo, la pareja se intercambió los papeles y fue el chico el que bajó al supermercado, esta vez a por un televisor de gran tamaño. Ella esperaba arriba con una cuerda para volver a robar el artículo utilizando el mismo modus operandi.
El incidente, que ha sido mostrado en programas informativos del país ibérico, ha llamado la atención de internautas y de la opinión pública. Actualmente la Policía está analizando las imágenes para intentar dar con los ladrones.