El encuentro iba a por el último minuto del primer asalto cuando el luchador ruso explotó con una serie de golpes ágiles contra la cabeza de Pereira. El brasileño trató de defenderse pero Shajbulátov se ensañó contra su oponente sin piedad.
Dos golpes a la barbilla y el brasileño resultó tumbado sobre el octágono medio inconsciente. Por instinto colocó sus brazos encima de la cara pero su rival fue imparable. Se lanzó encima para terminar con Pereira dándole a la cara una y otra vez.
Al ver que el combate se convertía en una golpiza, el réferi se vio obligado a interrumpirlo y arrastrar con fuerza a Shajbulátov para que no terminara matando al oponente indefenso. Como resultado, el ruso salió con la victoria.