Según los medios locales, para hacer realidad esta idea, tuvieron que hacer una inversión de unos 30.000 dólares, pero el esfuerzo valió la pena. Tiene espacio para una tripulación de tres personas. Sin embargo, carece de armamento real.
A pesar de presentar una configuración de lo más exótica, este modelo no fue el único tanque esférico concebido por los ingenieros de la URSS. De hecho, fueron múltiples los proyectos desarrollados en esta dirección, y el primero de ellos se remonta al lejano año 1915.
El mayor auge de estos experimentos tuvo lugar durante la Segunda Guerra Mundial, pero ninguno de ellos llegó a convertirse en una realidad. La URSS no fue el único país donde se contemplaron proyectos semejantes.