La cama de Isabel II supuestamente está hecha de pelos de colas de caballos latinoamericanos, cachemira proveniente de Mongolia y más de 2.500 kilómetros de hilo de seda.
Se necesitaron más de 700 horas de trabajo para la fabricación del lecho real, confeccionado a medida, detalló el tabloide.
La reina británica posee docenas de residencias reales en todo el país y no se sabe exactamente en cuál de sus casas se encuentra la valiosa cama.
El mueble para garantizar las buenas noches de sueño de la monarca de 94 años costó un total de 125.000 libras, lo equivalente a cerca de 163.000 dólares, detalló el medio.
El primer puesto lo ocupa la pareja estadounidense Kim Kardashian y Kanye West, que gastó casi un millón de dólares para dormir bien. Les sigue el rapero Drake, con su cama de poco menos de 400.000 dólares.