No existe evidencia científica que certifique la seguridad, eficacia o efectividad del dióxido de cloro en la salud, menos aún como tratamiento eficaz contra el COVID-19. A través del Ministerio de Salud el Gobierno transitorio de Jeannine Áñez alienta a la población a no consumirlo. Sin embargo, el lunes 17 de agosto la Asamblea Legislativa Departamental de Oruro habilitó su uso.
La ley departamental estipula que su producción, distribución y empleo deberá realizarse bajo supervisión médica. Según informó el periódico Página Siete, la ley deberá ser promulgada por la Gobernación de Oruro, el órgano ejecutivo del Gobierno departamental, en un tiempo máximo de 10 días.
¿Cómo es posible que un departamento boliviano haya podido legislar en contravención de la legislación y recomendación nacional? Desde 2010 los nueve departamentos bolivianos tienen autonomía ejecutiva y legislativa, pero no judicial. Cada departamento tiene una Asamblea Legislativa Departamental, que tiene la potestad de elaborar leyes autonómicas, que se aplican en el territorio departamental, como las relativas a la salud.
Oposición también a nivel nacional
El Gobierno nacional también se enfrenta a la Asamblea Legislativa nacional, que el 5 de agosto sancionó una ley que regula de manera excepcional la elaboración, comercialización, suministro y uso consentido de la solución de dióxido de cloro, para la prevención y tratamiento de la población por COVID-19.
El anuncio disparó la venta de esta sustancia que ya de por sí era popular en ciertos sectores de la población.
El Ministerio de Salud aseguró que "los promotores de estos irregulares procedimientos experimentales (no científicos) serán procesados con todo el rigor de la ley por atentar a la salud pública de la población", según un comunicado del 20 de julio.
¿Qué es el dióxido de cloro?
Se trata de una solución química al 28% de clorito de sodio en agua destilada. Similar a la lejía o al cloro, se utiliza habitualmente como blanqueador para limpiar y descontaminar superficies.
Aun así, esta información no tiene ninguna clase de aval científico, y las instituciones sanitarias a nivel mundial han advertido acerca de la peligrosidad de ingerir dicha solución.
Dentro los efectos adversos en la salud identificados por la agencia gubernamental estadounidense de Administración de Medicamentos y Alimentos (FDA, por sus siglas en inglés) están:
- insuficiencia respiratoria
- arritmias cardiacas
- baja presión arterial
- insuficiencia hepática aguda
- recuento bajo de células sanguíneas
- vómito y diarrea severos
El uso de la "solución milagrosa" es desaconsejado.