Tom Jefferson, del Centro de Medicina Basada en la Evidencia (CEBM) de la Universidad de Oxford, defiende su teoría aduciendo a una serie de recientes descubrimientos sobre la presencia del virus a lo largo del mundo antes de que se detectara por primera en China.
En una entrevista con el periódico británico The Daily Telegraph, Jefferson señaló la importancia de investigar cómo y por qué el virus parece prosperar en entornos como fábricas de alimentos y plantas empacadoras de carne. La temperatura allí suele estar a 4°C, que es el nivel ideal para la propagación del COVID-19.
"Creo que el virus ya estaba aquí, es decir, en todas partes. Podemos estar ante un virus latente que se activó por las condiciones ambientales", opina el investigador.
"La única explicación puede ser que estos agentes no van o vienen de ninguna parte. Siempre están aquí y algo los activa, tal vez la densidad humana o las condiciones ambientales, y esto es lo que debemos buscar", opina Jefferson.
También subrayó que cada vez hay más pruebas de transmisión fecal.
"Estos brotes deben ser investigados adecuadamente", concluyó.