Desde los primeros minutos de la pelea, la brasileña mantuvo una ventaja sobre su rival, quien terminó herida tras la pelea.
Spencer no pudo contrarrestar a su oponente en el cuadrilátero y cada maniobra de Amanda Nunes durante la pelea la acercaba más al título.
A partir del tercer asalto, la pelea se convirtió en una paliza literal y Nunes logró una ventaja abrumadora ante su oponente que aguantó hasta el final a pesar de las heridas que presentaba.
Al finalizar la pelea, todos los jueces le dieron a Nunes una victoria con una puntuación de 50-44, 50-44 y 50-45.