El experto, que también es el director de la revista Rusia en la Política Global, explicó por qué el asesor de seguridad nacional de EEUU, Robert O'Brien, se permitió realizar tales declaraciones. De acuerdo con él, tras intentar entablar relaciones económicas a largo plazo, desde hace mucho tiempo ya queda claro que ha comenzado un periodo de discrepancias entre China y Estados Unidos.
"Por ello, observamos hoy una fuerte escalada, guerras retóricas y un empeoramiento del ambiente en general en la confrontación entre ambo países", señaló.
Estados Unidos y China están pasando a una fase de competencia intensa, sobre todo, en los ámbitos comercial y económico. Y este enfrentamiento estará caracterizado por una variedad de manifestaciones ideológicas y de propaganda.
"Se ha puesto en marcha un proceso completamente natural que ha ocurrido más de una vez en la historia: cuando un país que ocupa posiciones dominantes y, como es el caso de EEUU, hegemónicas, ya no puede ejercer su dominio como antes porque aparece un Estado que reclama el mismo papel", concluyó.
O'Brien mostró su confianza en que EEUU sea el primero en desarrollar una vacuna contra el coronavirus. Sin embargo, no descartó la posibilidad de que China intente robársela.
"China está lista para compartir su experiencia en la investigación y en el desarrollo de la vacuna para fortalecer la cooperación internacional en este campo", señaló el diplomático chino.