"Esta notable galaxia espiral, conocida como NGC 4651, puede parecer serena y pacífica mientras se arremolina en el vasto y silencioso vacío del espacio, pero no se deje engañar: guarda un violento secreto", escribió la NASA en su web, al publicar una foto del conjunto de estrellas.
De acuerdo con el ente, para convertirse en "la espiral grande y hermosa que observamos hoy", esta galaxia devoró otra galaxia más pequeña.
La NGC 4651 es parte de la constelación de Coma Berenices, en el Cúmulo de Virgo, y tiene el tamaño aproximado de nuestra Vía Láctea. Su ubicación de 62 millones de años luz de distancia de nuestro planeta permite que sea visible con telescopios de aficionado.
"Si tienes un telescopio en casa y un buen ojo para estudiar las estrellas, busca esta brillante espiral carnívora", estimuló la NASA.