El tributo inició entre llantos y gritos de ovación del público asistente, dando paso a una triste música que acompañó la proyección de un vídeo donde se mostraban los momentos más memorables de la carrera de la estrella del baloncesto. En muchos de ellos estaba su hija Gianna, quien con apenas 13 años también perdió la vida junto a su padre.
Cada asiento tenía una playera con el apellido de Bryant y los números que usó durante sus partidos, el 8 y el 24. Todos los lugares estaban ocupados, excepto dos: los de Kobe y su hija Gianna.
La ceremonia concluyó con las palabras de LeBron James quien rompió en llanto al recordar a Bryant y prometió que él y sus compañeros darían continuidad al legado de Kobe.
"Esta noche celebramos al chico que vino aquí a los 18, se retiró a los 38 y se convirtió en el mejor padre que hemos visto en los últimos tres años", dijo LeBron.
El homenaje organizado por Los Angeles Lakers se llevó a cabo minutos antes de que se iniciara el primer juego que el equipo disputó como local desde el fallecimiento de Kobe Bryant.